El dilema de la semana

Esta semana he tenido un gran dilema sobre que voy a hacer este Sábado cuando el Querétaro reciba al Veracruz en la Primera fecha del torneo. No se si voy a ir al estadio como ha sido mi costumbre los últimos 5 o 6 años o de plano esta vez si voy a dejar de ir.

Yo le voy al Querétaro eso es innegable, me ha tocado vivir la mejor época en la historia del equipo, 2 campeonatos, 2 play-offs de ascenso, 1 ascenso, vivir la final en cancha ajena y otra en casa, celebraciones en el centro en fin, muchísimas cosas y que sin embargo por tercera vez estoy en la posición de no saber que hacer en cuestión de seguir apoyando a la franquicia.

Por que eso es lo que me desagrada, el entorno del fútbol donde compite mi equipo, este estilo de fútbol agringado donde los que forman parte de la liga casi-cerrada son franquicias donde el que manda es Don Dinero y no los méritos deportivos, donde solo millonarios son dueños exclusivos de los equipos, donde el aficionado no tiene voz ni voto y ha pasado a ser un cliente en vez de un hincha y donde el fútbol se ha convertido en un show mas que en un deporte. Las divisiones inferiores están monopolizadas por este grupo de 16 grandes (+2 no deseables) con lo cual no existe una real oposición que pueda poner en peligro la permanencia de alguno de los 16 grandes (+2 no deseables).

Todo este entorno es el que me dice que no debo seguir participando en su juego de monopolio, injusticias y engaños, sin embargo el Querétaro al ser de los 2 no deseados, al ser un poquito diferente a los demás 16 y al ser el que me ha robado el corazón es muy difícil dejarlo a un lado pero no puedo ignorar toda la suciedad que lo rodea.

Soy tal vez uno de los pocos aficionados a los que no le dolería tanto que el equipo descendiera o fuera comprado y cambiado de sede, me dolería mas que fuera comprado por una multinacional que lo hiciera uno mas de la basura de equipos de primera que hoy existen, sin alma, sin participación pero con muchos billetes y en ocasiones sucios billetes.

Es increíble que pueda tener mas participación y poder de decisión en un equipo ingles que esta a mas de 8,000 kms de distancia y que poco tiene que ver con el lugar que me rodea a poder unirme y defender la causa del equipo de casa o siquiera alguno de mi país.

Y bueno, hasta el momento va ganando la opción de ir al estadio y ver a los cuates después de 2 meses, echarse unas chelas, aplaudir el esfuerzo de algunos jugadores y que no me importe tanto el resultado.